Barreras invisibles
Elsa daba vueltas por su habitación con el móvil en la mano como una leona enjaulada. Y es que estaba atrapada dentro de sus propios barrotes mentales. No sabía si llamarlo e invitarlo a comer o no. Era un hombre interesante, pero apenas se conocían. ¿Qué iba a pensar de ella? ¿Y si le decía […]